Relatos de Ultravida

Si entonces le gritase a los cielos, me revelara y me haga trizas me estrelle entre nostalgias y cuentos que el día se los lleva con tanta prisa Me desaciera de mi encanto y mi gusto y mi tacto me estremeciera la espina y reventara en pedazos te enseñara a flotar el absurdo para jugar con migo Si entonces comprendieses que otras marcas llevan mi espalda si entonces comprendieses que hay cosas que ya van a sanar si entonces comprendieses que aquí estoy pero no puedo parar y que este paso hoy me deja ante tus ojos si entonces me entendieses y decidieses acompañarme hasta el horizonte y entonces un regaño te va ser bueno: no te olvides tu camino porque arde como el fuego y no te dejará dormir si entonces me escucharas sabrás que alguien me marcó los ojos y me quiso oscurecer y ese alguien lo sabe muy bien y no sabe ser feliz mas nunca duerme tranquilo hasta que pueda sentir que alguien está mas allá esperando un perdón.

Si hay algo queme habita  del dolor a la tristeza la gama se amplifica según la mirada según la pureza de tus pasos de las risas en falso, que hagas para herir de las muecas siguientes que puedes sentir ya no te buscas, lo que es peor, te dejas estar y tal vez no. De ser felíz se trató y no te animaste

No puedo luchar con vos No puedo decirtelo no puedo escuchar tu voz y aveces duele y hoy no pude escucharte no pude decirte lo que no oirás no intentarás saber pues cuando el tiempo diga cuando las agujas marquen cuando me dejes matarte y sonreír tal vez cuando se haga tu llanto de un santo silencio y un mudo ocaso Será cuando veas tu sangre fluir, detrás de tus venas, ante tus ojos llenos de culpa Llenos de vos. Mas cuando temas mas cuando escuchas Mas cuando esperas Mas cuando vas Tras una ruina de una astuta Forma de matarte forma de huir te mataste con dolor que criaste con pasión.

Si la avaricia pudiera. sacarme las ganas. La sangre de horas no me traen respuesta. La realidad es una y se ve de muchas maneras mas algunos se cansan de hablar ...y fantasean. Esta es la locura, amarrada a las sirenas, cantos, lluvia y sueño. Noche y aún despierta, sueña. Locura. Contra la pereza, decide volar, antes que presa, antes ser un elemento más del sistema o un pequeño subvenir de que regalar, canta y sueña, danza en la ciénaga Ensúciate y baila, despedaza tu conciencia Arriba están los locos, mirando el pasado mediocre de tantos que sin goce pasan la vida de tantos que sin goce la dejan desapercibida. La locura festeja. Tanta cordura a muchos les bajo las cejas les cortó las alas les lleno de polvo las piernas. Y en vida argumentan, que quieren la muerte. y así la locura es la serpiente, con un veneno letal mas antes de la muerte la locura dio las respuestas ante preguntas de eternidad. Ahí estan los locos, arriba de todos en un

Abrazarte por Nada, ser leal por nada. Ser amor a nada. Darte algo: Nada. No siento Nada.  Te abro las dedos, desnudo mi alma. Dibujo palabras en tus oídos, quemo miradas... y contradigo. Y nada.  No sientes Nada. Algo me ata.  Entre almohadas,  un nido de cosas absurdas y vanas Nada. Espero mañana, ningún camino te deje extraviada. Ningún sueño te de la espalda. Tan distintos, tan lejos. Sin nada el uno y el otro. Mas eso que guardas Mas eso que queda por hablar. Nada. El frío en tu espalda. Espasmo de algo que te vuelve aturdir.

Un pedazo de rayón, en un billete de cien. Un poco de tinta china Manchando el valioso papel. Media Sonrisa, mueca Que esfuma el huracán. Un pedazo de vos detrás de lo que ocultas. Otro pedazo de vos entre mis ropas y discos Algún trozo de Entonces y un aroma de ayer. Alguna foto de cuando nos decidimos a dejarnos de joder. Este vestigio de Mañana y un siempre será Algún vestigio que Nunca vio la luz. Alguna estrella que yo sembré para vos. De un "quizás nos deje de doler" Un  "¿Para cuándo?" que quedó por preguntar. Todo fundido en un bolsillo de Hoy Algo que así. me dejó moribundo. Ladrándole mudo al torcido porvenir Algo qeu ahora me hace reír. Y un pedazo de mí. quedó tirado por ahí....

Dueño de su vida, dueño de su día, su único día. Perdido: había perdido mi camino, había encontrado el suyo. Dueño de sus horas, en su pequeña agonía, dueño de su verde bastedad. En un terrible lugar que no tuve miedo. No conoció el tiempo, no conoció compañía No tuvo ojos que le muestren el dolor. Dolor de su eterno arrastrarse No conoció el sol que le otorgó su paso. La noche se lo llevó a certezas, que en otro volverá. No conoció de amores, de dolores, de frío ni calor. No conoció la lluvia y el porqué de su húmeda piel. Nunca supo que lo quise, lo quise tanto. Y sé que tal vez, en el universo, siendo dueño de sus horas, alguien fue feliz.